Irreverente
6 de mayo de 2010
La palabra "Francia" deriva de la tribu de los francos que invadió la Galia durante el siglo 5, en tiempos de la desintegración del imperio romano de occidente.
Los francos y los galos (germanos y celtas) fusionados y junto a diversos grupos importantes dieron origen a los franceses.
Aun en la actualidad se suele emplear "franco" o "galo" para designar a lo que es "francés" o a lo que está relacionado con lo francés.
La configuración de sus fronteras geográficas en el continente europeo, ha hecho que se le dé el nombre de el hexágono.
Francia se ubica en su mayor parte en el centro de Europa Occidental. Forma parte de la Unión Europea (UE) de la cual es uno de sus fundadores.
La Francia metropolitana limita al suroeste con España y Andorra; al oeste con el Océano Atlántico; al norte con el Canal de la Mancha y con el Reino Unido; al noreste con Bélgica, Luxemburgo, Alemania y Suiza; al este con Mónaco e Italia; y al sureste con el Mar Mediterráneo.
La monarquía francesa es comúnmente datada en el siglo V, con la dinastía merovingia que hubo de detener, en unión con otros pueblos, a los Hunos.
A esta le siguió la dinastía carolingia, llamada así en honor a Carlos Martel, quien contuvo el avance de los árabes venciéndolos definitivamente en la batalla de Poitiers.
Su nieto Carlomagno convirtió el reino en un gran imperio, el imperio carolingio, que desde las Galias, llegó a ocupar gran parte de Europa, generando en su gobierno un notable desarrollo y estímulo de la cultura conocido como el renacimiento carolingio.
Al morir Carlomagno, sus nietos se dividieron el imperio en 3 partes.
La parte occidental, Francia; la parte oriental, considerada el orígen de lo que hoy es Alemania, y la parte central (la Lotaringia) que incluía lo que ahora es Italia, Países Bajos, Bélgica, Luxemburgo, Suiza y las zonas fronterizas entre Francia y Alemania.
Los normandos (hombres del norte: noruegos o vikingos, suecos o varegos y daneses) habían permanecido quietos mientras sus hermanos de raza se repartían el imperio romano.
Pero, hacia el año 800, en la plenitud de su poderío, creyeron llegado su turno, y, convertidos en terribles piratas, dieron comienzo al gran asalto que modificó totalmente la vida europea.
Su sistema de invasión era novedoso: no se desplazaban con toda tribu como los otros germanos, sino que constituían formidables bandas.
Al llegar la primavera se acercaban a las costas a bordo de sus veloces naves y penetraban por los ríos hasta el corazón de los pueblos robando e incendiando las poblaciones.
En otoño, regresaban a sus guaridas del norte.
Más tarde, cuando decidieron asentarse, se establecieron en lugares estratégicos de la costa, y cada verano repetían sus terribles incursiones.
Toda Europa soportó sus ataques durante más de 200 años, y todas las grandes ciudades, como París, Lisboa, Londres, Hamburgo y Sevilla fueron saqueadas o incendiadas por estos forajidos.
Francia les dio poco trabajo: el nieto de Carlomagno, varias veces tuvo que pagarles para que levantaran el sitio de París.
Su hijo, en el año 911, no encontró mejor solución que dar a su jefe el título de “duque" y la posesión de toda una provincia francesa, llamada “Normandia" desde entonces.
Allí establecidos, los normandos no tardaron en modificar sus costumbres, asimilando rápidamente la cultura del resto país.
En el año 987 Hugo Capeto, tomó el poder tras un golpe de estado, instaurando una dinastía real que se transmitió en línea directa masculina: los capetos.
En 1214 se da la primera afirmación de la unidad nacional con la victoria de Felipe Augusto en Bouvines.
En 1429 Juana de Arco, con las tropas de Carlos 7, defiende la ciudad real sitiada por las tropas inglesas. Los ingleses levantan el cerco.
Obedeciendo órdenes inglesas, Juana de Arco morirá en la hoguera en Rouen.
En 1515 se da la victoria del ejército de francisco 1 en su reconquista del milanesado (Milán), y ésta dio pie a la introducción en Francia de los gustos y cánones artísticos del Quattrocento (periodo artístico italiano del siglo 15)
En 1539 el francés se convierte en la lengua oficial del reino.
En 1572 se da la matanza de San Bartolomé. En varias grandes ciudades se persiguió y masacró a los protestantes causando miles de muertos.
Entre 1661-1715 se da el reinado de Luis 14, y fue el más largo de la historia monárquica francesa.
Fue entonces cuando Versalles se convirtió en el símbolo del prestigio real.
En 1685 quedó derogación el edicto de nantes, que institucionalizaba la libertad de culto, promulgado por enrique 4 en 1598.
Muchos protestantes tuvieron que exiliarse, abjurar o morir.
El 5 de mayo de 1789 el rey convocó a la nobleza, el clero y el tercer estado para hacer frente a la crisis del antiguo régimen. Este fue el primer acto de la revolución francesa.
El 14 de julio, La Bastilla, prisión casi en desuso, cae en manos de los revolucionarios.
El 22 de septiembre de 1792 se proclamó la 1ª. República tras la batalla de Valmy, en la que las tropas revolucionarias vencieron a la coalición europea que había acudido en defensa de la monarquía.
El rey es condenado a morir guillotinado en enero de 1793.
El 26 de agosto de 1789 se da la declaración de los derechos del hombre y del ciudadano, inspirada en los filósofos de la ilustración.
A partir de entonces, ante la ley, los hombres nacen libres y con los mismos derechos.
El 2 de diciembre de 1804 el general Bonaparte, proclamado emperador de los franceses, se hace coronar solemnemente en Notre- Dame de París (y corona él mismo a su esposa Joséphine en presencia del papa).
Entre 1830-1848 la restauración del poder real resulta imposible. Levantamientos populares expulsan a Carlos 10 en 1830 y a Luis Felipe en febrero de 1848.
En 1848 se instaura el sufragio universal masculino y se proclama la abolición definitiva de la esclavitud (abolida una primera vez en 1794, pero restaurada por Bonaparte en 1802) gracias a la acción conjunta de los esclavos insurrectos de Martinica y Guadalupe y de Victor Schoelcher.
En 1852 comienza el segundo imperio. Luis Napoleón Bonaparte, nombrado en 1848 presidente de la nueva república, es elegido emperador.
En 1870 la derrota de sedán ante los prusianos precipita la caída del régimen. Francia pierde parte de Alsacia y de Lorena (fueron recuperadas en 1918).
Entre 1881y 1884 se proclaman una serie de leyes sobre la enseñanza y las libertades públicas (prensa, reunión, asociaciones profesionales y sindicales).
En 1905 se promulga la ley que establece la separación de la iglesia y el estado.
Entre junio y julio de 1940 el ejército alemán invadió Francia.
El mariscal Pétain firmó un armisticio mientras que el general De Daulle, desde Londres, instó a la nación a la resistencia.
En agosto de 1944 el general De gaulle, que se había declarado en Londres jefe de la Francia libre y más tarde se había puesto en Argel al frente del gobierno provisional de la república, entra en la capital. Cae el gobierno de Vichy.
En 1946 se da la implantación de una importante legislación social, se da la nacionalización de los hidrocarburos, del ferrocarril, las mujeres conquistan el derecho al voto.
Entre 1954 y 1962 la mayoría de las colonias francesas consiguen la independencia.
En 1957 se firma el tratado de roma por el que se crea la comunidad económica Europea, unión aduanera y un mercado común compuesto por 6 países europeos, entre ellos Francia.
Con el tratado de Maastricht la comunidad económica europea se convirtió en la unión europea en 1993.
En 1958 aprovechando la crisis argelina, el general De Gaulle retoma el poder, instaurando la 5 república y la nueva constitución refuerza los poderes del gobierno.
En 1968 el país quedó, durante más de un mes, paralizado por las huelgas.
En 1981 fue elegido François Mitterrand como presidente de la república (fue reelegido en 1988).
Su primer mandato estuvo marcado por la abolición de la pena de muerte, las leyes de regionalización y un programa de nacionalización de grandes empresas.
En 1995 es elgido Jacques Chirac (reelegido en 2002).
En 2007 Nicolas Sarkozy es elegido presidente de la en república por un mandato de cinco años.
Obras y monumentos
Francia ofrece una variedad arquitectónica tan vasta que abarca todos los períodos, desde la antigüedad (el puente del Gard) a los palacios reales de los siglos 17 y 18 (el Castillo de Versalles o el Institut de France).
Pasando por los castillos cátaros, las abadías e iglesias románicas testimonio del floreciente monarquismo (Chartres, Fontenay, Cluny, Vézelay).
También tiene catedrales góticas, obras maestras del arte francés (Notre-Dame, Reims), y los Castillos del Loira, símbolo del refinamiento del renacimiento (Chambord, Chenonceaux, Amboise).
Hubo una época en la que se podía destruir completamente para reconstruir desde cero: el Castillo de Blois es un buen ejemplo de la yuxtaposición de estilos encadenados cronológicamente que legitimaba la destrucción de fragmentos antiguos.
De hecho, la noción de patrimonio histórico es muy reciente: data del siglo 19.
En 1833, el escritor Prospère Mérimée fue nombrado inspector de los monumentos de Francia.
Su función era salvaguardar las obras monumentales del pasado y, junto a Viollet-Le-Duc, restaurarlas, con arreglo a normas estilísticas hoy bastante discutidas.
Su primer trabajo, emprendido en 1840, fue la restauración de la abadía de Vézelay, al que siguió la remodelación de Notre-Dame de París. Desde entonces se protege y admira el patrimonio.
Se protegen asimismo las edificaciones del patrimonio industrial.
jueves, 6 de mayo de 2010
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