Caja de Pandora
8 de abril de 2011
Lo primero que se necesita para empezar a tener un estilo de vida activo y saludable es la actitud.
Está comprobado y aprobado que la gente que hace ejercicio no solamente puede mantenerse en un peso normal, sino que puede alcanzarlo aún si su genética y alimentación no son las más favorables.
Si una persona no gasta por lo menos 2 mil kilocalorías a la semana haciendo ejercicio, se puede clasificar dentro del rubro de sedentarios.
De igual forma, es muy importante el tema de la alimentación pues nuestro cuerpo necesita energía para funcionar y la obtenemos a través de los alimentos.
También es importante tomar en cuenta el descanso.
Pero alrededor de la actividad física giran muchos mitos, principalmente los que tienen que ver con dietas milagrosas, productos para marcar nuestros músculos fácilmente y los aparatos milagrosos.
Algunos de los mitos más recurrentes en cuanto a la actividad física son los siguientes:
1. Usar fajas de goma o de plástico hacen transpirar y ayudan a quemar más grasa.
Falso. El mecanismo de reducción de grasas se debe a un balance alimenticio y la cantidad de calorías quemadas a lo largo del día y no a la acción del calor externo sobre el cuerpo.
2. Hacer abdominales adelgaza.
Falso. Los ejercicios abdominales sólo permiten tonificar y endurecer el plano muscular, pero no eliminan el tejido adiposo que lo rodea.
3. La natación es el deporte más completo.
Falso: La natación es un trabajo aeróbico con el que se pueden obtener los mismos beneficios que al correr, remar, esquiar, saltar la cuerda, etc.
4. Los ejercicios de fuerza masculinizan a la mujer.
Falso: El crecimiento de la masa muscular que se ve entre culturistas se debe a primero un intenso entrenamiento con grandes cargas durante 6 días a la semana y luego de varios años de trabajo.
Segundo se debe a la ingesta de hormonas anabolizantes que promueven el crecimiento muscular.
Tercero, los hombres naturalmente poseen mayor cantidad de la hormona testosterona, responsable del crecimiento muscular.
Por último, la mujer tiene mayor porcentaje de grasa corporal que el hombre, por tanto para promover el crecimiento muscular tendría que trabajar un 50% más de volumen de carga que el hombre, para poder igualarlo.
5. Si duele la zona trabajada quiere decir que el ejercicio estuvo bien realizado.
Falso: generalmente, luego de largos períodos de inactividad o de una ejercitación intensa aparecen dolores musculares.
El dolor muscular luego de hacer ejercicio puede deberse a causas como Microrruptura de fibras musculares, o a que no hicimos el ejercicio de la manera correcta.
6. Con tan sólo 20 minutos de ejercicio se queman grasas.
Falso. Al realizar actividad física el organismo necesita recurrir a diferentes combustibles orgánicos para obtener energía.
Realmente se comienzan a quemar grasas aproximadamente 20 minutos después de empezar el ejercicio, es por ello que lo recomendable es realizar al menos una hora.
7. Hacer mucho ejercicio sólo durante el fin de semana nos puede mantener en forma.
Falso: El “partidito de fútbol con amigos” improvisado o el esfuerzo desmedido, no entrena los músculos, el corazón o los pulmones de forma eficaz. Para ponerse en forma realmente, la clave es la constancia.
jueves, 7 de abril de 2011
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario