Irreverente
3 de febrero de 2011
La vigésima primera edición del Salón Internacional de Alta Relojería se llevó a cabo del pasado 17 al 21 de enero en Ginebra Suiza.
Este salón es un evento privado al que sólo tienen acceso profesionales invitados por cualquiera de las 19 marcas en exhibición.
Este año se contó con la presencia de 12 mil 500 invitados, mil 200 periodistas y mil 500 representantes de puntos de venta de todo el mundo.
Las marcas participantes fueron:
A.Lange & Söhne
Alfred Dunhill
Audemars Piguet
Baume & Mercier
Cartier
JeanRichard
Girard Perregaux
Greubel Forsey
IWC
Jaeger LeCoultre
Montblanc
Officine Panerai
Parmigiani Fleurier
Piaget
Ralph Lauren Watch & Jewelry Co
Richard Mille
Roger Dubuis
Vacheron Constantin
Van Cleef & Arpels
Los clientes de estas 19 marcas fueron principalmente de origen europeo con un 60% de participación, siguieron los asiáticos con 20%, americanos con 12% y de Oriente Medio 8%.
El Museo Beyer de Zúrich presentó los modelos históricos que representan más de cuatro siglos de la historia de la relojería y Cartier presentó alrededor de 300 piezas de su Colección privada.
ALGUNAS NOVEDADES
La legendaria Audemars Piguet reveló Millenary AP Minute Repeater, que rinde homenaje a una de las más antiguas complicaciones de la historia: el indicador de minutos audible.
De esa forma se sabía la hora en el siglo 15, cuando no había luz.
Es una pieza de titanio y oro rosa calibre 2910 de cuerda manual con escape exclusivo de AP.
Otro homenaje lo hizo Jaeger Le Coultre con el Grande Reverso Ultra Thin Tribute, con una esfera negra o blanca con índices bastón y agujas espada.
Está inspirado en el Reverso original de 1931, creado hace 80 años para proteger la esfera del reloj de los golpes andando a caballo.
MBandF, presentó JwlryMachine, una versión de su reloj concepto HM3 en forma de búho tridimensional.
La carátula está cubiertas de amatistas, diamantes, zafiros violetas o rosas con turmalina y cuarzo, y se elaboró en colaboración de la casa joyera Boucheron.
Parmigiani develó el Tonda 1950 que se distingue por sus puentes Côte de Geneve decorados a mano y sus dos versiones de esferas con apliques pulidos diamantados.
También salió a la luz el Montblanc Rieussec Anniversary, que celebrará el 190 aniversaro de la creación del cronógrafo por Nicolas Rieussec.
Al igual que el modelo original de 1921, es un reloj mecánico de cuerda manual, en el que las manecillas del cronógrafo no rotan sobre las esferas, sino que se mantienen inmóviles mientras los segunderos y minuteros del cronógrafo giran.
Está montado sobre elegantes números Breguet contenidos en una caja de oro rosa, blanco o platino.
Baume & Mercier cambió su logotipo y esta renovación también incluyó la modernización en el diseño de sus piezas y una nueva misión como empresa.
IWC, la segunda marca más importante en el ámbito de la relojería dentro del gigante Richemont, ofreció una de las fiestas más memorables dentro del Salón.
Ahí se presentó la nueva colección de relojes de la familia Portofino, uno de los modelos icónicos de la compañía.
SITUACIÓN DE LA RELOJERÍA SUIZA
Según la Federación de la Industria Relojera Suiza, las exportaciones de relojes crecieron un 30% durante el mes de noviembre 2010 comparado con el mes de noviembre de 2009.
Se espera que la facturación de relojes suizos en el extranjero superará los 17 millones de francos suizos en 2011.
Asia y Oriente Medio fueron dos mercados clave para el sector relojero suizo en 2010 y estima que su presencia se consolidará este año.
Los relojes más vendidos son los de acero con 80% del total, sin embargo, los que se abren camino más rápidamente con los fabricados con piezas de oro.
La venta de este tipo de relojes creció un 40% en el extranjero durante el 2010, aunque esto representa sólo 5 de cada 10 relojes comercializados.
A nivel regional uno de los mejores mercados es Hong Kong, pues 2 de cada 10 relojes suizos son consumidos por ese mercado.
Les siguen los estadounidenses con 1 de cada 10.
En la lista siguen Francia, Singapur e Italia casi a la par de China , quien podría convertirse este año en el tercer lugar como consumidor de relojes facturados en Suiza.
El precio promedio de una pieza suiza comercializada en el extranjero es de 3 mil francos, es decir, poco más de 38 mil pesos.
Según un estudio de la consultora KPMG Suiza la industria del lujo se ha instalado en el mercado chino, especialmente entre consumidores de 20 a 44 años de edad que tienen un creciente poder adquisitivo.
China se ha convertido ya en el segundo mercado consumidor de productos de lujo más importante a escala mundial, solo rebasado por Japón.
jueves, 3 de febrero de 2011
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