miércoles, 6 de octubre de 2010

Implan-T

Jungla de asfalto
6 de octubre de 2010

Perder una pieza dental definitivamente es algo de lo más traumático que le puede pasar a una persona, sobre todo si es un diente frontal que afecta totalmente la apariencia.

En México, 8 de cada diez mexicanos padecen de caries o enfermedades periodontales que afectan las encías y la estructura que da soporte a los dientes.

Esto, además de provocar dolor y mal aliento, puede provocar la pérdida de piezas dentales.

Según datos de la Secretaría de Salud, a los 12 años se tienen, en promedio, 2 piezas dañadas, los adultos de 44 años poseen 15, y los de 65 años, 17 de un total de 32 piezas definitivas.

Además se ha detectado que hay una gran cantidad de personas entre 25 y 35 años que ya presentan desde pérdida de algunas piezas, hasta la pérdida absoluta de la dentadura.

Afortunadamente hoy en día, los dientes perdidos pueden ser reemplazado por prótesis artificiales que permiten recobrar la funcionalidad y la sonrisa.

Y aunque esto parece nuevo, en realidad ya se tiene constancia de que los mayas fueron la primera cultura en realizar un implante de diente en una persona viva.

Esto se descubrió en una tumba en Honduras, en 1931, donde los restos de una mandíbula de 600 años después de Cristo tenía 3 trozos de concha en forma de dientes.

Los colocaron para sustituir tres incisivos inferiores perdidos y alrededor de ellos había hueso compacto.

Esto demostró que el implante se tuvo cierta integración con el hueso de la mandibula.

Pero los implantes tal y como los conocemos hoy en día se deben a los estudios del traumatólogo sueco Irmag Branemark.

Durante sus experimentos introdujo en conejos fibra óptica recubierta de titanio para mirar en el microscopio los cambios que se producían en los animales.

Al cabo de unas semanas, la fibra no podía ser retirada del hueso porque estaba adherida, fue entonces cuando se desarrolló el concepto de "osteointegración".

De esta forma se logró el desarrollo de los implantes modernos de titanio que se integran con el propio hueso de paciente y que no es rechazado por el organismo.

IMPLANTES DENTALES IMPLAN-T

Los implantes dentales son pequeños tornillos diseñados para sustituir la raíz natural de los dientes para insertar una prótesis.

Mediante su integración en la mandíbula se puede sustituir desde un solo diente hasta una arcada dental completa.

Estos implantes se colocan de manera quirúrgica, en los huesos de la mandíbula o del maxilar.

Hoy en día, los implantes dentales más utilizados tienen forma de cilindro o de cono que imitan la forma de la raíz.
El 98% de los pacientes que se someten a un implante dental logran la restauración exitosa de sus dientes o de sus muelas perdidas.

En IMPLAN-T, el Cirujano Dentista Eduardo Medina García lleva 4 años realizando los implantes dentales por medio de una técnica asistida por computadora.

Esta técnica se llama “All-on-four” y permite asistir a pacientes que han perdido una pieza, que están totalmente desdentados o que están en riesgo de perder sus dientes.

El sistema Nobel Guide que usan en Implan-T permite diagnósticar, colocar y rehabilitar los dientes sin errores.

Su clínica está en el W.T.C. en Montecito no. 38, piso 39, oficina 32, Col. Nápoles.

Su teléfono es 9000 47 48 y 9000 47 49.

QUIÉNES SON CANDIDATOS A UN IMPLANTE DENTAL

Los pacientes deben someterse a una evaluación médica para determinar si el procedimiento de colocación del implante no pone en riesgo su salud.

Básicamente se debe evaluar si existe algún factor que pueda afectar la capacidad de cicatrización del hueso o tejido blando asociado.

Si el paciente reúne las condiciones médicas necesarias para someterse a un proceso de cirugía oral general, es buen candidato para el implante.

Aquellos pacientes con condiciones médicas o de otro tipo, que puedan interferir en el proceso de cicatrización del hueso o del tejido blando no son buenos candidatos.

Estas condiciones pueden ser por ejemplo, trastornos del tejido conjuntivo, tratamiento con esteroides, infecciones óseas o tabaquismo.

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